Manual del guerrero de la luz

Un guerrero sabe que  sus mejores maestros
son las personas con las que divide el campo 
de batalla.

Es peligroso pedir un consejo. Y mucho más
arriesgado darlo. Cuando él necesita ayuda,

procura ver cómo sus amigos resuelven —-o
no resuelven—-sus problemas.
Si busca la inspiración, lee en los labios de su
vecino las palabras que su ángel de la guarda
quiere transmitirle.
Cuando está cansado o solitario, no sueña con
mujeres y hombres distantes; busca a quien está
a su lado, y comparte su dolor o su necesidad de
cariño, con placer y sin culpa.
Un guerrero sabe que la estrella más distante del
Universo se manifiesta en las cosas que están a su
alrededor.


 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *