Mi dolor no lo imaginas:
es de sutil como un sueño;
Por tu inconstancia, una cima,
cuando me miras, pequeño.
Mi dolor es una hoguera
que con tu ausencia me abrasa
siento a la vez primavera
cuando me alumbra tu gracias.
Es a veces cruel delirio
que torturando aniquila,
pero también es cariño
anegando mis pupilas.
Mi dolor es todo o nada:
Es puñal que me tortura;
suavidad de cielo y agua,
bálsamo, paz y frescura.
Abierta herida que sangra
por caminos de añoranza;
musical tono en el alma
modulado en dicha mansa.
Mi dolor no lo imaginas,
porque mirando tu cara
todo el pesar se me olvida,
¿Comprendes qué cosa rara?