DIÁLOGO
» Si tu hermano peca, ve y corrígelo en privado.
Si te escucha habrás ganado a tu hermano».
Mateo 18, 15
La clave del diálogo consiste en saber escuchar al otro.
Dialogar exige respetar al otro como es y dejar que sea
distinto.
Lo más difícil del diálogo consiste salir de ti y ponerte
en el lugar del otro para comprendedlo.
Algunos creen que dialogan cuando logran que alguien
los escuche sin contradecirlos.
Todo diálogo se habría más fácil, si lo dos interlocutores
aceptaran que, casi siempre, ambos tienen razones y
ninguno tiene razón.
Estamos hartos de intercambiar palabras sin sentir que
nos comunicamos, dialogando de verdad.
Si vas a dialogar para imponer tu punto de vista, no vas
a dialogar.
El resultado más importante del diálogo maduro no es
la coincidencia sino la comprensión.